En el día a día, es común cometer errores que parecen inofensivos (como mezclar colores, usar agua muy caliente o secar al sol) y que terminan afectando la elasticidad, el color, la textura y la forma de las prendas. Calper, tienda especializada con más de 35 años de experiencia en el rubro de calzado y uniformes clínicos de reconocidas marcas como Cherokee, Dickies o Barco, entrega una serie de tips para cuidar tus uniformes y tu imagen profesional.
1. Usar cloro o blanqueadores: el enemigo número uno de las telas
Aunque pueda parecer una solución rápida para eliminar manchas difíciles, el cloro es uno de los productos más agresivos para telas clínicas. ¿Por qué daña tus uniformes?
- Debilita las fibras sintéticas.
- Produce manchas amarillentas.
- Acelera el desgaste y la pérdida de color.
- Reduce la elasticidad en prendas stretch.
Qué hacer en cambio: Usa detergentes suaves y libres de cloro. Para manchas específicas (como tinta o sangre), utiliza quitamanchas aptos para ropa de color o fórmulas enzimáticas y lava siempre con agua fría o tibia.
2. Exposición directa y prolongada al sol
Secar la ropa al sol directo deteriora los colores más rápido de lo que imaginas, especialmente en tonos intensos como en uniformes clínicos negros, azules, verdes o burdeo. Efectos negativos:
- Decoloración prematura.
- Pérdida de tono uniforme.
- Resequedad en las fibras.
¿Cuál es la mejor práctica? Secar a la sombra o en interiores bien ventilados. Si usas secadora, opta por temperatura baja o función delicada.
3. Mezclar colores claros y oscuros en el lavado
Uno de los errores más comunes es mezclar colores por prisa o pereza. Esto provoca que los tonos oscuros transfieran pigmentos a los claros, arruinando uniformes en un solo lavado. ¿Cómo prevenirlo? Lava siempre por grupos de color:
- Blancos
- Pasteles / celestes
- Colores intensos
- Negros
Voltea la prenda antes de lavar para proteger el color exterior y evita llenar demasiado la lavadora.
4. Usar agua demasiado caliente
Muchos creen que lavar con agua muy caliente elimina mejor las bacterias, pero esto no es necesario para prendas clínicas modernas y puede incluso dañarlas. Consecuencias:
- Pérdida de elasticidad.
- Aparición de “pelusas” o textura áspera.
- Desgaste del color.
Lo ideal es lavar entre 20° y 30°C para la mayoría de telas clínicas. Revisa siempre la etiqueta de cuidado del uniforme.
5. Exceso de planchado o uso de altas temperaturas
El calor excesivo puede deformar fibras sintéticas, dejar marcas brillantes o incluso quemar la tela. ¿Cómo evitarlo?
- Usa la plancha a temperatura baja/media.
- Coloca un paño delgado sobre la prenda para evitar contacto directo.
- Si tu uniforme es stretch, plancha solo si es realmente necesario.
Aprovecha el secado colgado para evitar arrugas.
6. No revisar los bolsillos antes de lavar
Parece un detalle menor, pero es uno de los errores más dañinos. Revisa bolsillos antes de cada lavado. ¿Qué objetos comunes dañan tus prendas?
- Lápices (manchas permanentes).
- Tijeras o instrumentos metálicos.
- Papeles que se desintegran y se adhieren a la tela.
7. Usar suavizante en exceso
Aunque deja la ropa con un aroma agradable, el suavizante puede quedarse adherido a las fibras, especialmente en telas técnicas, provocando daños como:
- Reduce la transpirabilidad.
- Afecta el stretch.
- Acelera la acumulación de residuos.
Úsalo en dosis muy pequeñas o elimínalo si tu uniforme es de material técnico-elástico.
Cómo cuidar tus uniformes clínicos para que duren más
Los uniformes clínicos de Calper están confeccionados con telas técnicas, resistentes y duraderas, pero aun así requieren cuidados básicos para mantener su calidad. Recuerda estos consejos y extiende la vida útil de tus uniformes clínicos, manteniendo una imagen profesional y pulcra en cada jornada.
]]>