Durante el intercambio, la atención se centró en la controversia de un indulto en retorno de información sobre los detenidos desaparecidos en dictadura. La pregunta surgió a partir de la franja electoral de Jara, donde se insinuaba que Kast buscaba beneficiar a Krassnoff.
El candidato anunció: “Yo le puedo decir visité Punta Peuco, sí”, pero destacó que fue hace ocho o diez años. En ese contexto, abogó por la verdad en el testimonio de un joven que lo mencionó en su declaración, sugiriendo que estas visitas no deberían ser utilizadas políticamente en su contra.
Kast enfatizó su desacuerdo con la idea de “delación compensada”, argumentando que cree en la justicia y en tratar con respeto a quienes sufren enfermedades terminales. Esta postura se alinea con un proyecto de ley propuesto por senadores de Renovación Nacional y la UDI sobre penas alternativas para prisioneros mayores o enfermos.
Al ser cuestionado nuevamente sobre un posible indulto, el aspirante a la Moneda resolvió el tema: “se acabó (el tiempo), las reglas son las reglas”, dejando claro que no busca flexibilizar la condena a quienes han cometido graves violaciones a los derechos humanos.
Este debate, en medio de un contexto electoral marcado por la polarización, ilustra las tensiones profundas en la sociedad chilena respecto a su legado dictatorial y la continua búsqueda de justicia para las víctimas. La incredulidad de Kast frente a la negociación de indultos da cuenta de su intento de distanciarse de las sombras que aún persisten en la memoria colectiva del país.
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